RELATOS IMPORTANTES DEL TERREMOTO EN ICA

Acabo de llegar desde la PUCP, lugar en el que he pasado los minutos más largos de mi vida. Es la primera vez que vivo un terremoto y buena parte del mismo lo pasé en el sotano de la Biblioteca de la Universidad. La gente salió con calma y, salvo las sobrecargas eléctricas que parecían rayos, todos mantuvimos la tranquilidad.

Como era de suponer, he estado llamando a mi casa como loco hasta antes de llegar. Las líneas telefónicas colapsaron y por momentos quedó interrumpido. Recién al llegar a casa y comprobar que todo está bien me he sentido mucho más aliviado.

A estas alturas, como todos saben, el sismo se ha producido frente a las costas de Pisco y ha sido de una intensidad calculada entre 7.5 y 7.9 grados en la escala de Richer.Hasta el momento, se registran 20 fallecidos como producto del sismo. La iglesia de Luren ha colpasado, al igual que el hotel Libertador de Paracas. En Lima, se han producido ligeros daños materiales y cortes de fluido eléctrico. Parte de la Carretera Central ha quedado interrumpida.

Acaba de hablar el Presidente de la República que está en un Consejo de Ministros de emergencia. Ha pedido serenidad y tranquilidad, que es lo que cabe en este tipo de casos. Se ha declarado el Estado de Emergencia en Ica y se dispone que los Ministros de Vivienda, Producción y Salud, junto a Jorge del Castillo, estarán en Cañete, Chincha e Ica. Se suspenden las clases escolares mañana por precaución por daños. Toda la Policía está en alerta. Los hospitales de Seguridad Social y Sanidad de las Fuerzas Armadas darán servicio gratuito a los afectados. Alan se ha quejado, con razón, del colapso de las líneas telefónicas, que yo tuve que experimentar.

Dos mensajes finales. Mantengan la calma durante la noche. No se sí habrá réplicas, pero todos debemos tomar nuestras previsiones. Y ojalá que con esto comencemos a tomar los simulacros de sismo en serio y no como la chacota que para muchos termina siendo.

Mañana informaré con más detalle. Esperemos que todos pasemos una buena noche y que no hayan más víctimas que lamentar.